HISTORIA DE LOS FUEGOS ARTIFICIALES

Los fuegos artificiales se originaron en China hace 2,000 años. La leyenda más conocida es que los fuegos artificiales se originaron o se inventaron por accidente cuando un cocinero chino que trabajaba en una cocina al aire libre mezcló carbón, ácido sulfúrico y nitro (todos productos conocidos en la cocina de esa época). La mezcla se quemó y cuando fue comprimida en un tubo de bambú explotó. Algunas fuentes dicen que el descubrimiento ocurrió hace 2,000 años y otros en el siglo IX (nueve) durante la dinastía Son (960-1279) aunque esto puede ser la confusión que ocurre entre el descubrimiento de la pólvora y la invención de los fuegos artificiales. Algunas fuentes sugieren que los fuegos artificiales pueden haberse originado en la India, pero en octubre 18 del 2003, una edición electrónica de un periódico hindú le da crédito a China de haber descubierto la pólvora.

Un monje chino llamado Li Tian, quien vivía cerca de la ciudad de Liu Yang en la provincia de Hunan, se le acredita la invención de los fuegos artificiales hace 1,000 años. Los chinos celebran la invención de los fuegos artificiales el día 8 de abril, ofreciendo sacrificios a Li Tian. Durante la dinastía Song, las personas de la localidad establecieron un templo dedicado a Li Tian. A los fuegos artificiales, antes y ahora, se les ha atribuido el poder de evitar los espíritus malignos y los fantasmas, que son ahuyentados con los estallidos de los fuegos artificiales. Los fuegos artificiales son usados hoy días para celebras nacimientos, muertes y cumpleaños. El Año Nuevo chino es un evento muy popular que se celebra con fuegos artificiales que ahuyentan los espíritus malos. Hasta hoy la región de Liu Yang en la provincia de Hunan es el centro de producción más importante en el mundo de los fuegos artificiales. Es importante recordar el origen geográfico de los fuegos artificiales, porque sus adversarios dicen que se usa a China porque produce una fuerza laboral a poco costo. Pero la realidad es que la industria de los fuegos artificiales ha existido antes del advenimiento de la era moderna y de las diferencias en el pago laboral y esperamos que continuara después del efecto del paso del comunismo en la economía china.

Generalmente se acredita a Marco Polo de traer el conocimiento de la pólvora a Europa en el siglo XIII, aunque algunos creen que los cruzados trajeron la pólvora en sus viajes. En Europa se usó la pólvora con fines militares, primero en cohetes, después en cañones y armas de fuego. Los italianos fueron los primeros en producir la pólvora con esos fines. Alemania fue el otro país europeo que surgió como uno de los líderes en el área de los fuegos artificiales junto con Italia en el siglo XVIII. Es interesante de notar que muchas de las más importantes familias americanas en el mundo de los fuegos artificiales son descendientes de italianos, tales como las familias Grucci, Rozzi y Zambelli. Los ingleses también estuvieron fascinados por los fuegos artificiales. Los fuegos artificiales fueron muy populares durante el reinado de la reina Isabel I. William Shakespeare menciona los fuegos artificiales en su obra y fueron muy disfrutados por la reina Isabel I, de ahí que creara un cargo de «Maestro Oficial de los Fuegos Artificiales de Inglaterra». El rey Jaime II disfrutaba tanto los fuegos artificiales que durante su coronación le concedió la orden real de caballero a su oficial.

En la era moderna, la industria americana comenzó a ejercer influencia en la industria china después de la normalización de las relaciones con el gobierno chino comunista en los años 70. Anterior a este tiempo, todos los negocios se concertaban a través de comisionistas en Hong Kong y no se tenía contacto directo con los fabricantes chinos. A través de los años 1970 y 1980, la distribución china era esencialmente producida por fábricas estatales que exportaba a través de corporaciones provinciales. Los productos de Hunan eran exportados a través de la corporación de exportación de Hunan, y los productos de Jiangxi a través de la corporación de exportación de Jiangxi. Durante ese periodo no se requería que las empresas tuvieran ganancias, el objetivo era mantener a la gente en una región en China, donde no existía otra industria que la agricultura. El gobierno chino les daba un subsidio para que las fábricas continuaran la producción.

La corporación provincial de exportación a su ve les vendía a los comisionistas en Hong Kong, ya que ellos eran el enlace entre China y las empresas extranjeras. Ellos procuraban los pedidos, arreglaban todo y ayudaban a financiar el envió a los distribuidores en los Estados Unidos. Fue durante este período que el líder chino, Chairman Deng Xiaoping, vio lo que los líderes del bloque soviético no vieron, y es que el comunismo necesitaba reformas económicas. Chairman Deng implantó una política de reformas económicas que básicamente llevaron a China al camino del capitalismo. Durante los años de 1980 China se abrió dramáticamente a los viajes dentro de sus fronteras a importadores de los Estados Unidos. Esto ayudó a que los primeros compradores de fuegos artificiales pudieran viajar a los sitios de producción y de establecer relaciones con los importadores de Hong Kong y las corporaciones provinciales de exportación. Es también en los años de 1980 que los consumidores de los fuegos artificiales fueron investigados intensamente por la Comisión de Seguridad para el Consumidor de los Estados Unidos. Hasta ese momento, la mayoría de los fuegos artificiales tenía etiquetas genéricas para la exportación y muchas veces era incorrecta en tamaño y funcionamiento. Para corregir esa situación, representantes de la comisión, de la Asociación americana de Pirotecnia y la Asociación de comisionistas de Hong Kong pasaron 10 días en reuniones en la China con diversos representantes de cada corporación de exportación y con los administradores de las fábricas por cada provincia. En las reuniones se probaron cada uno de los fuegos artificiales producidos en chino para poder determinar la apropiada y correcta descripción, y para que los consumidores norteamericanos pudieran tener etiquetas de aviso de seguridad. Se dice que los norteamericanos realmente asombraron a los miembros chinos de la industria china y que de esa reunión nación el ‘American Fireworks Standards Laboratory’ (AFSL) que es un monitor de la producción china hasta hoy en día.